La sostenibilidad en el diseño de interiores está cobrando cada vez más relevancia, ya que las empresas y los propietarios de viviendas buscan sustitutos ‘verdes’ de los materiales tradicionales. Las películas decorativas MANLEE están ganando popularidad como una alternativa sostenible que no compromete la estética visual, a menudo opacada por materiales de tendencia pero que consumen muchos recursos.
Reducción del impacto ambiental
A diferencia de la madera, la piedra o el metal, se necesitan muchos menos materiales primos para producir películas decorativas. Esto no solo reduce el impacto ambiental de la extracción y producción, pero también utiliza menos materiales primos. MANLEE aborda este problema ya que sus películas poliméricas se fabrican bajo los principios de amabilidad con el medio ambiente.
Además, la instalación de películas decorativas puede mejorar la eficiencia energética general del edificio. Por ejemplo, las empresas pueden aplicar películas para ventanas con propiedades reflectantes que ayudarán a minimizar el aumento de calor en el interior, por lo tanto, se requiere menos enfriamiento y se reduce la factura de energía.
Durabilidad y longevidad
Los films decorativos de MANLEE, al mismo tiempo, plantean otro desafío de sostenibilidad: la longevidad. Los films resisten el desgaste normal y se convierten en un elemento permanente en el interior, ya sea en un edificio residencial u oficinas. Esta longevidad reduce la necesidad de renovaciones o reemplazos frecuentes, lo que a su vez significa menos desperdicio de materiales.